Para ello, hay que escuchar, luchar y, ante todo, formarse. El gran pensador Confucio decía: “Donde hay educación, no hay distinción de clases”. ¡Y qué razón tenía! Hoy en día soy empresario y emprendedor. Y he pasado de tener mi propia tienda de informática de barrio, a tener una tienda de informática en la nube, en todos los barrios del mundo.

Pero todo éxito viene precedido de una palanca . Y en mi caso, no fue otra que la formación profesional. Siempre he hecho migas con la tecnología, por eso decidí estudiar informática. Gracias a la FP pude aprender no sólo lo suficiente para convertirme en técnico de sistemas informáticos. También toda una serie de valores que me han acompañado, y aún lo siguen haciendo, en mi vida profesional.

Trabajo en equipo, implicación, compromiso, innovación… Todos ellos me dieron finalmente el impulso y la valentía para lanzarme a emprender. Está claro que con esfuerzo, ilusión y perseverancia las cosas pueden conseguirse. Por eso, levántate, piensa en lo que más te gusta y haz todo lo que esté en tus manos por lograrlo.

Hoy tienes un amplio abanico de profesiones para formarte. Elijas lo que elijas, la clave está en ti, sólo tienes que dar el paso. Y nada mejor que la FP para aprender sobre el terreno y llegar a ser lo que quieres.

Cuando terminé mis estudios me dediqué a reparar ordenadores. Ahora, gestiono Myfixpert, la únicaweb a nivel mundial que pone en contacto a técnicos y usuarios que quieren reparar sus móviles, tablets, portátiles… Pasé de buscar empleo a dar empleo a más de 1.500 profesionales del sector TIC.

Como podéis ver, lo que empezó siendo una profesión acabó convirtiéndose en una pasión. Una pasión llena de sueños por cumplir, y que estoy seguro que tú también compartes.

Estudiar una profesión es sólo el comienzo. Los cimientos que guiarán tu camino y que harán de ti la persona que siempre quisiste ser. Lo mejor está por venir. Pero antes de dar el salto, prepara el trampolín. Fórmate. Conócete. Actúa. ¿Qué quién soy yo? Simplemente, un tipo como tú.