Derechos digitales
¿Qué son los derechos digitales?
En la actualidad, proteger los derechos de la infancia en el entorno digital se ha vuelto fundamental y, para ello, la Observación General No. 25 del Comité de los Derechos del Niño ha establecido una serie de principios que los garantiza. En este contexto, la Fundación Atresmedia y UNICEF España han lanzado la campaña "Menores de edad, no de derechos digitales" para darlos a conocer y promover su cumplimiento.
En un mundo cada vez más interconectado y digitalizado, proteger los derechos de los niños en el entorno digital se ha convertido en una prioridad fundamental. La rápida evolución de la tecnología ha brindado innumerables oportunidades y beneficios, pero también ha planteado nuevos desafíos y riesgos, sobre todo para los niños, niñas y adolescentes.
Los derechos digitales se refieren a derechos fundamentales que deben protegerse y promoverse en el entorno digital, de manera similar a como se protegen en el mundo físico. Estos derechos incluyen, entre otros, el derecho a la privacidad, el derecho a la libertad de expresión, el derecho a la educación y el derecho a la participación.
La Convención sobre los Derechos del Niño, tratado internacional que se aprobó el 20 de noviembre de 1989 por la Asamblea General de las Naciones Unidas y que establece los derechos fundamentales de todos los niños y niñas, se ha adaptado a esta era digital. Así, en 2021 se publicó la Observación General No. 25 del Comité de los Derechos del Niño, recogiendo la necesidad de reconocer y proteger los derechos de la infancia también en el entorno digital. Esta herramienta debe servir para que los niños, niñas y adolescentes puedan conocer, promover y exigir el cumplimiento de sus derechos en este ámbito.
Dentro de la Observación General núm. 25 se establecen cuatro principios que deben guiar las medidas dirigidas a garantizar la efectividad de los derechos de los niños también en el entorno digital:
1. No discriminación: Todos los niños y niñas tienen derecho a acceder y participar en el entorno digital sin ser discriminados por su género, origen étnico, discapacidad o cualquier otra característica.
2. Interés superior del menor: Al tomar decisiones en el entorno digital, se debe priorizar el bienestar y desarrollo de los niños y niñas. Esto implica considerar cómo las acciones digitales afectan su seguridad, educación y salud.
3. Supervivencia y desarrollo: El entorno digital debe contribuir al crecimiento y desarrollo integral de los niños. Esto incluye acceso a educación de calidad, oportunidades de juego y socialización, y protección contra riesgos digitales.
4. Respetar el punto de vista de los niños y niñas: Involucrar a los niños en las decisiones que afectan su experiencia digital. Escuchar sus opiniones y considerar sus perspectivas al diseñar políticas, servicios y productos digitales.
Esta Observación es fruto de un proceso de consultas de 3 años en el que han participado los Gobiernos de 40 países, cientos de organizaciones y empresas, 50 expertos de 28 países y, muy especialmente, ha contado con la participación de más de 700 niñas, niños y adolescentes de todo el mundo, que han podido expresar sus preocupaciones e ideas.
Así, los derechos digitales de la infancia son esenciales para que todos los niños, niñas y adolescentes puedan beneficiarse de las oportunidades que ofrece la era digital, sin dejar de estar protegidos ante los riesgos y peligros asociados. Por ello, es responsabilidad de todos ser capaces de:
- Ofrecerles las mejores oportunidades para desarrollar su derecho a la información, a la libertad de expresión y a la participación cívica.
- Asegurarse que el entorno digital está libre de información falsa y de actitudes y contenidos dañinos.
Para garantizar que estos principios se cumplan, desde la Fundación Atresmedia y UNICEF España hemos lanzado la campaña “Menores de edad, no de derechos digitales” con la que queremos dar a conocer los derechos digitales de los niños, niñas y adolescentes y promover su cumplimiento para crear un entorno digital que sea seguro para su desarrollo y se convierta en un espacio de aprendizaje, creatividad, participación y colaboración.