Tras las prácticas obligatorias en empresa, en las que pude trabajar en varios programas de televisión, y con una idea más clara de todas las diferentes ramificaciones del audiovisual decidí cursar un grado universitario en Publicidad y Relaciones públicas.
La transición entre estos dos mundos: la Formación Profesional y la universidad fue muy sencilla y conté con la ventaja durante la carrera de disponer de una base teórica y práctica que me fue muy útil durante mis años universitarios.
La simbiosis entre FP y carrera universitaria crea, en mi opinión, una poderosa combinación muy atractiva para las empresas.