Esta iniciativa se centró en la renovación de libros de sus  aulas, en la creación física de bibliotecas diseñadas expresamente por la Fundación y la puesta en marcha de ludotecas en aquellos centros que así lo requerían. Entre los fondos bibliográficos aportados se encuentran los títulos de mayor éxito infantil y juvenil de editoriales de reconocido prestigio como Planeta, Santillana, SM o Ekaré.

Para los juguetes de la ludotecas siempre se tuvieron en cuenta las edades de los niños a los que iban dirigidos (de 0 a 12 años), así como las circunstancias especiales que supone estar en un hospital: juguetes educativos, didácticos y participativos. Para ello, se contó con la asesoría de la Fundación Crecer Jugando (www.crecerjugando.org), entidad que trabaja en la defensa y promoción de uno de los derechos fundamentales del niño: el derecho al juego.