En este tercer tema vamos a conocer la perspectiva europea sobre la Formación Profesional y para ello debemos repasar un poco su historia reciente.

La Formación Profesional en Europa

Ponemos primero el foco en el año 2002; cuando tiene lugar el Proceso de Copenhague. Porque es a partir de ese momento cuando Europa empieza a contemplar la posibilidad de armonizar los sistemas de formación profesional de todos los países para favorecer la movilidad de los trabajadores. Se pone en marcha entonces una estrategia para mejorar el rendimiento, la calidad y el atractivo de la FP europea.

Esta estrategia, que se revisaba cada dos años, culminó en 2010 en Brujas cuando se plantea una estrategia a largo plazo que pretende modernizar los sistemas de educación y las competencias que necesita el mercado de trabajo: el llamado ET 2020, una estrategia que incluía una serie de indicadores que debían ser alcanzados por todos los países.

Llegamos a 2015, cuando en Riga se hace balance de la situación y deciden centrarse en 5 áreas prioritarias para

alcanzar los objetivos de la ET 2020 a medio plazo y que son:

  • Promover el aprendizaje en el trabajo en todas sus formas, con especial atención a la formación de aprendices.
  • Seguir desarrollando los mecanismos de garantía de la calidad en la FP.
  • Mejorar el acceso a la FP y a las cualificaciones para todos a través de sistemas más flexibles y permeables.
  • Seguir reforzando las competencias clave en los planes de estudios de la FP.
  • Y por último, desarrollo profesional inicial y permanente de los profesores, formadores y tutores de FP.

La situación de la FP en los países europeos

En Europa se han implementado tres grandes modelos:

  • El modelo liberal de mercado inglés, donde la organización se negocia “en el mercado”, entre representantes sindicales, empresarios y suministradores de formación profesional.
  • El modelo regulado por el Estado en Francia.
  • Y el modelo corporativo y dual de Alemania, que es organizado por cámaras de oficios y artesanos reguladas estatalmente y organizada por sectores profesionales.

En realidad, cada país es un mundo y un estudio dice que hay hasta 30 modelos diferentes en Europa, donde el nuestro, el de España, estaría dentro del patrón que entiende la FP como Formación Profesional inicial, centrada en la escuela. Es decir, más dirigida a jóvenes de entre 15 y 19 años, impartido en aulas principalmente, con un enfoque tradicional basado en disciplinas, centrada en la escuela, y concebida como una enseñanza transversal donde el desarrollo personal parece más importante que la mano de obra cualificada.

Sin embargo, esto ya está cambiando gracias a los objetivos fijados en Riga. Se empieza a implantar el aprendizaje basado en el propio puesto trabajo; un sistema que beneficia a estudiantes, empleados y empresas.

Políticas y acciones de la UE

A continuación, vamos a conocer brevemente algunas políticas y acciones se han tomado en la Unión Europea a favor de la FP. Son muchas y variadas, pero nosotros vamos a destacar 4 de ellas.

Empezamos por el marco Europeo de las calificaciones. Una herramienta que indica los resultados del aprendizaje expresado en conocimientos, destrezas y competencias. Este indicador sirve para mejorar la confianza y transferencia de trabajadores y estudiantes entre los distintos estados miembro.

El sistema europeo de transferencia de crédito, un sistema que reconoce los periodos de estudio en el extranjero, incrementando la calidad y el volumen de la movilidad de los estudiantes en Europa, a través de la conocida beca Erasmus +, de la que hablaremos al final de este vídeo.

El siguiente es el sistema europeo de créditos para la Formación Profesional, que pretende facilitar a los estudiantes de FP obtener la validación y reconocimiento de sus conocimientos y habilidades relacionadas con el trabajo, adquiridas de diferentes formas y en diferentes países. Es un marco técnico para la transferencia, el reconocimiento y, cuando proceda, la acumulación de resultados individuales.

Y por último, el marco de referencia europeo para la garantía de calidad en la Formación Profesional. Un instrumento de referencia europeo diseñado para ayudar a los países de la Unión a la mejora continua de sus sistemas de formación profesional y elevar el grado de transparencia, movilidad y aprendizaje permanente. Consta de un ciclo de planificación, evaluación y revisión en materia de garantía y mejora de la calidad de la FP. Además de un conjunto de criterios de calidad, descriptores indicativos e indicadores comunes para todos los estados miembros.

Destacar también que la Comisión Europea en materia de Formación Profesional cuenta con dos agencias descentralizadas de la Unión Europea que ayudan a potenciar la calidad, a participar como interlocutores entre políticos, agentes sociales y ciudadanos o simplemente, mejorar la imagen de la Formación Profesional: Estamos hablando del Centro Europeo para el desarrollo de la Formación Profesional y la Fundación Europea para la Formación.

Erasmus +

El Erasmus + es un programa de la UE de apoyo a la educación, formación y juventud y deporte en Europa.

Un programa con más de 30 años que se basa en tres acciones clave:

  • Movilidad por motivos de aprendizaje.
  • Cooperación para la innovación
  • Intercambio de buenas prácticas

Actualmente se destina un 22% del presupuesto a la Formación Profesional, lo que ha facilitado la movilidad de alrededor de 650 mil estudiantes de FP en los últimos 7 años

En nuestro país, la gestión de los fondos europeos y nacionales del programa Erasmus + corresponde al SEPIE, Servicio Español para la Internacionalización de la Educación, y en su web podéis encontrar toda la información al respecto.