El estudio presenta una serie de efectos positivos para quienes han tenido este tipo de contratos, observando la duración de sus empleos posteriores y las tasas de salida del desempleo. En este sentido, entre las conclusiones de Fedea se expone la necesidad de evitar que la diferencia en las condiciones de los estudiantes de Formación Profesional Dual, que reciben una beca, y los aprendices con contrato de aprendizaje, que cobran un salario, desincentive a los jóvenes a obtener un título en educación secundaria o FP.
En apenas cinco años de vida, la FP Dual ha conseguido unos resultados muy positivos. En otro informe, presentado esta misma semana por Fedea, se analiza y compara la experiencia de esta modalidad con la FP Presencial en la Comunidad de Madrid. Según este último estudio, los graduados en FP Dual acumulan un 27% más de días de trabajo durante el primer año y la diferencia de ingresos respecto a los graduados en FP presencial alcanza el 32%.
Fedea apuesta por adaptar los ciclos a las necesidades de las empresas, proporcionar formación de calidad y ayudar a las pymes a implantar el sistema, pues constituyen la mayoría del tejido productivo en España.