El Hospital Vall d'Hebron, referente de humanización por su planta de oncohematología, es uno de los 120 centros que han participado en la segunda edición del Índice de Humanización de Hospitales Infantiles.
Para Laura Hernández, enfermera pediátrica en este hospital, la humanización consiste en "intentar que los niños y las familias se sientan como en casa". Con este objetivo, escuchan los miedos e inquietudes de los más jóvenes, "intentando crear acciones para gestionarlas y cuidándolos de una manera más cercana".
Joan Manel, padre de una joven ingresada en el Vall d’Hebron, considera que la humanización de los hospitales "es esencial tanto para los familiares como para los enfermos ingresados". Cuenta que su hija Marina todavía recuerda los dibujos que había en la sala de espera el día que ingresó en Urgencias. Algo que demuestra que "los pequeños detalles son importantes".
La humanización de un hospital abarca tanto "la decoración de la habitación, como el tiempo del que puedan disponer las familias para pasar juntos, o la educación que pueda recibir el paciente durante el tiempo de ingreso", añade Rubén Navarro, quien también es familiar de un paciente del Hospital Vall d'Hebron.
Si quieres formar parte de la nueva edición del Índice de Humanización de Hospitales, completa el formulario antes del 31 de enero.