¿Qué ha supuesto la Fundación para Atresmedia hasta ahora?

La fundación fue el inicio del compromiso del entonces Grupo Antena 3 con la sociedad hace ya 15 años. Entonces fuimos unos pioneros porque fuimos el primer grupo de comunicación que ponía en marcha una fundación para destinar parte de sus ingresos a proyectos sociales. A partir de su creación nos dimos cuenta de la importancia que tenía involucrarnos en problemas reales que afectaban a la sociedad y de nuestra responsabilidad social como compañía. Desde entonces y gracias a su labor, hemos acompañado a muchos niños hospitalizados para hacer su estancia más amable en el hospital y hemos impulsado la empleabilidad juvenil a través de la FP o la calidad educativa en nuestro país. Sin duda su labor ha sido muy importante en estos 15 años y nos sentimos orgullosos de todos los resultados que ha conseguido. Y aunque ahora iniciamos una nueva etapa y nos enfocaremos en un nuevo ámbito de actuación, nos seguiremos centrando en los niños y en los jóvenes y continuaremos defendiendo sus derechos e intereses.

¿En qué consiste la nueva fundación?

A partir de ahora la fundación se centrará en lo que se denomina alfabetización mediática e informacional. Es decir, queremos que los niños y los jóvenes tengan las competencias necesarias para entender mejor los medios de comunicación y los contenidos que consumen a través de las diferentes plataformas a las que acceden. Que sean más críticos y que se formen sus propias opiniones. Porque, aunque resulte increíble, la mitad de los jóvenes no saben distinguir un hecho de una opinión, o no saben identificar una información sesgada. Viven hiperinformados pero sin embargo no tienen las habilidades para entender y analizar toda esa información y contenidos que consumen. Y ahí es dónde queremos estar como fundación. Queremos ayudarles a adquirir esas habilidades a través de diferentes proyectos formativos y de sensibilización y que sean unos ciudadanos más críticos, creativos y responsables.

¿Por qué este cambio?

La realidad de los niños y los jóvenes han cambiado mucho en estos últimos 15 años y es evidente que su relación con los medios de comunicación también es distinta, mucho más inmediata e interactiva. Incluso la manera de comunicarse entre ellos es muy diferente. Estamos viendo todas las oportunidades de conocimiento a las que tienen acceso gracias a este contexto, pero también hemos detectado muchos riesgos, como la desinformación, la distorsión de la realidad, la exposición a los bulos, problemas de autoestima o de acoso en las aulas... Así que era el momento de que la fundación se adaptara a esta realidad, y que evolucionara para poder responder a las necesidades y a los nuevos retos a los que niños y los jóvenes se están enfrentando y que además están directamente relacionados con nuestro sector y con nuestra actividad como medio de comunicación